VER FOTOGRÁFICAMENTE. Diferencias entre el ojo y la cámara

Peter Henry Emerson lo tenía claro. No es lo mismo “lo real” que “la visualización de lo real”. No es lo mismo lo que ve el ojo que lo que ve la cámara, y para controlar los resultados debemos ser conscientes de ello y conocer sus diferencias. Emerson fue el máximo representante del naturalismo y postulaba que la visión fotográfica debe parecerse a la visión humana, como único modo moralmente correcto de hacer fotos.

Atenuaba los contrastes, buscaba sombras con detalle, hacía enfoques selectivos, despreciaba los papeles brillantes, sólo usaba lentes que equivaldrían al 50mm de las camaras de paso universal,… Se obsesionó tanto con la técnica que, como no podía hacer lo mismo que el ojo, terminó por renegar de la fotografía: “Es la más baja de todas las artes”.

Efectivamente, hay un montón de cosas que diferencian cómo ve el ojo y cómo lo hace la cámara y en este artículo enumeraré de manera esquemática los principales de esos aspectos que derivan de la naturaleza técnica de la fotografía.

Si bien pueden parecer cosas muy básicas, posiblemente el verlas de manera ordenada espero que sea de ayuda a mucha gente que está empezando en esto de la fotografía y que desea, de manera autodidacta, ir mejorando o ampliando sus recursos y su lenguaje visual. Y para ilustrar este artículo, nada mejor que las fotos que en el foro fueron distinguidas como Caborian Shot por su calidad, así que antes de empezar, agradecer a todos los que me cedieron el uso de sus fotos.

1. El encuadre.

Una de las primeras decisiones cuando realizamos una foto es establecer qué incluimos en ella y que dejamos fuera. Aislar una porción de todo lo que vemos y reducir la información que llegará al espectador.

Esto que parece sencillo puede ser parte del éxito de la foto, no ya sólo por la no inclusión de elementos accesorios que hubiesen distraido o diluido la composición, sino también porque podemos fomentar las siguientes cuestiones:

1a. Relaciones internas. Será inevitable que el espectador intente buscar una relación entre los elementos de la foto. Así, si fotografiamos a 2 personas que en la realidad no tenían nada que ver, aisladas en la superficie de la foto pasaran a “entablar un diálogo” e intentaremos buscar la historia que los une.

En esta foto de acontragolpe fácilmente podriamos pensar que el perro es de la persona que se ve al fondo, si bien no tenemos ningún dato objetivo para pensarlo y bien pudiera ser que el dueño sea el propio fotógrafo o alguien que esté junto a él, fuera de cuadro.

1b. Fuera de foto.

Las fotos pueden presentar una escena cerrada, en la que todo está a la vista o puede que se invite al espectador a completar la imagen. A veces como juego visual, otra como elemento de sorpresa al realizar una composición más arriesgada o incluso como recurso para introducir un punto de misterio a la acción.

La decisión de juanito de realizar este corte hace que la vista de vaya directa a esa zona, y que por un lado nos fijemos en esos labios y que por otro intentemos ver lo que no vemos.

Esta otra de jeje lo que consigue por composición, por la expresión del niño y por la dirección de la mirada es que nos preguntemos qué hay ahí, y que intentemos ver más allá de los límites de la foto.

1c. Otra de las posibilidades que nos permite el tener que elegir qué incluimos en la foto y qué no, es la descontextualización. Este sistema de alcanzar la abstracción es puramente fotográfico, y permite ver con nuevos ojos muchos objetos, como en este ejemplo de Carol Honorio

1d. De esa decisión del encuadre también deriva la del formato, que tendrá una gran influencia en el aspecto de nuestra foto. Podremos acentuar el dramatismo con una toma vertical. Podrmos recurrir a formatos cuadrados, que suelen producir composiciones muy equilibradas. O presentar enormes panorámicas. Elecciones todas ellas que no tienen nada que ver con cómo ve el ojo la realidad.

John Silver el Largo

La fotografía digital ha liberado mucho este tema de las proporciones de las fotos, ya que controlamos en su totalidad el procesado, y ha facilitado también la unión de fotos.

2. Representar en 2 dimensiones algo de 3

Que las fotos son en 2 dimensiones es algo obvio, pero genera ciertas dificultades, como puede ser el que un objeto se nos confunda con el fondo o la típica farola que parece nacer en la cabeza del retratado. Esta sensación, que la vista no tiene, debe saber preverse e incluso sacarle partido, ya que ese “defecto” abre las puertas a trucajes de perspectiva por yuxtaposiciones o falsas uniones, o a juegos visuales como la siguiente foto de cigalotron.

Sin embargo, generalmente uno de los mayores esfuerzos a la hora de hacer una foto es conseguir transmitir la sensación de espacio. Para ello podemos emplear, individualmente o combinados, los siguientes recursos:

2a. Las reglas de la perspectiva cónica.

Explotar las líneas que convergen en puntos de fuga. Las mayores sensaciones de profundidad se suelen lograr con perspectivas centrales (un solo punto de fuga) y en fotos verticales donde el recorrido de dichas líneas puede ser mayor. Como en la foto de Chapi.

2b. Comparación de tamaños.

La repetición de un mismo objeto a distintos tamaños nos hará entender la distancia que existe entre ellos, como en la foto de Idoika, que sin esos elementos resultaría plana al carecer de referencias.

2c. Gran angular.

El empleo de focales de gran angular posibilita incluir en la foto elementos que por su proximidad y tamaño resultante en la foto contribuirán a la sensación de amplitud y profundidad, como en esta foto de danielniel.

2d. Sucesión de planos.

Establecer claramente los planos de una escena, por ejemplo situando algo claramente en primer plano, que si además está cortado por el límite de la foto acentúa su efecto, al “anclarlo”, por contraposición a otros elementos que puedan “flotar” en la composición. Incluso se puede crear un marco de la foto dentro de la foto.

mastintin

Aitorp

2e. Enfoque selectivo

Una variante del punto anterior para diferenciar planos y transmitir profundidad es jugar con un enfoque selectivo, de tal modo que tengamos un primer plano desenfocado, un segundo plano a foco y un fondo desenfocado.

sandepablos

2f. Difuminado o efecto niebla.

Con ciertas condiciones atmosféricas, los objetos lejanos van perdiendo nitidez y se difuminan, siendo este efecto mucho más acusado en días con niebla. También esto se puede emplear como recurso para establecer jerarquías espaciales, aparte de conferir en muchos casos atmósfera a nuestras fotos.

Félix

3. Reacción del material sensible a la luz: velocidades lentas

Los materiales sensibles, ya sea película o sensor digital, poseen la posibilidad de “acumular” información a lo largo del tiempo que dure la exposición. Algo imposible de realizar por el ojo humano y que supuso una serie de nuevos recursos para el lenguaje visual, inexistentes hasta la aparición de la fotografía.

3a. Rastros, movimientos.

Con exposiciones largas podremos hacer fotos con aguas que parezcan sedosas, que transmitan el movimiento de los rios y las olas; podremos hacer fotos del cielo nocturno en el que se aprecien los rastros de las estrellas; podremos hacer barridos; o podremos realizar fotos de calles “sin gente” si tiramos lo suficientemente lento como para que los peatones no queden registrados.

Siempre habrá que buscar el tiempo adecuado para cada escena, desde tiempos inferiores a un segundo (que según para que cosas puede ser un tiempo muy largo) a exposiciones de varias horas.

Rascafer

3b. Traer la luz a la oscuridad.

Esa característica también permite hacer fotos con detalle allí donde el ojo sólo ve oscuridad.

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4.Reacción del material sensible a la luz: congelar el movimiento

4a. Altas velocidades.

 De todos es sabido la posibilidad de emplear altas velocidades para congelar el movimiento. Ello nos permite no sólo conseguir tomas que no salgan movidas o trepidadas, sino la posibilidad de ver escenas que el ojo no es capaz de captar por la rapidez a la que transcurren. Valga como ejemplo clásico que hasta que no se perfeccionó la técnica fotográfica se pensaba que los caballos al galope levantaban las 4 patas del suelo simultáneamente.

Frikosal. Velocidad de obturación 1/2500

En este tema de fotografía de alta velocidad el uso del flash puede jugar un papel importantísimo, ya que permitirá congelar acciones para las que incluso las velocidades más altas de obturación se quedarían cortas. Esta es la técnica empleada por jcarolvs para la siguiente toma.

4b. Congelar el movimiento con velocidades lentas.

Otro modo de congelar el movimiento y transmitir sensación de velocidad es recurrir a la técnica denominada “barrido”, consistente en emplear velocidades de obturación inferiores a la necesaria y acompañar el movimiento del objeto a retratar con un movimiento de cámara. De este modo, respecto a la cámara, el objeto “no se mueve” (siempre ocupa el mismo lugar en el fotograma) pero el fondo sí. Si se hace bien sería como combinar los resultados expuestos en el punto 4a y los del 3a.

Gzrally

5. Zonas con detalle

Con el ojo, con claridad vemos sólo una pequeña zona, aquella donde centramos la vista, y el resto de la visión es de carácter más vago. Por muy rápido que se adapte el ojo para pasar de un punto de atención a otro, esto es así.

Con la cámara podemos elegir si queremos una foto parecida a ese efecto, o sea con una profundidad de campo escasa, que era lo que buscaba Emerson, o si por el contrario preferimos que todos los planos salgan enfocados. Y por supuesto, todas las posibilidades entre ambos extremos.

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6. Distancia focal

Esta es otra de esas diferencias evidentes entre el ojo y la cámara. Para hacer fotos podemos elegir el tipo de objetivo que sea más idóneo para la toma que vamos a realizar. Desde el tele al gran angular, podremos sacar partido a las cualidades de cada uno de ellos. Para aplastar la imagen o para ensanchar los espacios. Para conseguir más fácilmente un enfoque selectivo o para jugar con sus deformaciones. Para “meternos” en la acción o para establecer cierto alejamiento con los sucesos. También existen objetivos especiales. Ojos de pez, descentrables, catadióptricos…

En este caso podemos ver cómo k explota al máximo las posibilidades del gran angular.

Mención especial merecen los objetivos macro, o cualquier técnica de fotografía macro (fuelles, anillos, objetivos invertidos). Gracias a ellos se hace visible un mundo de detalles que a simple vista no podemos ver y eso, bien empleado, puede ser un aliciente para las fotos, como en esta de P.Candela.

7. Rango dinámico o latitud de exposición

El ojo es capaz de ver perfectamente y de manera simultánea el interior de una habitación y lo que se ve por sus ventanas. Apreciamos detalles en zonas que poseen mucha diferencia de luz. Pero la cámara no. Ese rángo dinámico de los sensores digitales, o esa latitud de exposición de las películas, puede ser más o menos amplio, pero tiene un límite, y más allá de ser un impedimento, se puede sacar mucho partido de ello. Podremos jugar con sombras profundas, incluso negros, que nos contrastarán la foto y le conferirá una fuerza muy plástica.

Podremos emplear esa limitación en la reproducción, para resaltar el tema de nuestras fotos. Por ejemplo, en retrato, si queremos eliminar un fondo molesto tenemos la posibilidad de buscar el modo de que quede subexpuesto o sobreexpuesto respecto al modelo.

Bien es cierto que con técnicas digitales se pueden realizar fotos con enorme rango dinámico, pero, como todo, habrá que evaluar si es recomendable para según que casos.

Ggaramba

Existen otra serie de diferencias entre la visión humana y la fotográfica, como pueden ser el hacer fotos en blanco y negro, manipular el contraste, la saturación de los colores, etc. que por tratarse fundamentalmente de un tema de elección de película o tratamiento de software, se escapa del contenido de este artículo. Pero todo lo aquí visto, encuadre, objetivo adecuado, etc. forma parte parte de las decisiones que debemos tomar al hacer una foto. Uniéndolas a otras como composición, elección de tema o planificación, obtendremos nuestras imágenes. Cuanto más conscientes seamos de todos los aspectos que rodean una foto más posibilidades de éxito tendremos y de más recursos dispondremos.

Héctor Fdez. Santos-Díez