Buenas
Voy a comentar algo, que seguro que a más de uno le parece una barbaridad
Hace 3 meses, viaje de novios. Escala vea usted Roma en 6 horas, poco más o menos, con guía y todo. La cámara, pues la Minolta 5D, el 18-70, un Tamron 70-300 del analógico que se convierte en un 105-450 por el factor de multiplicación, el flash, el disco duro, la mochila, las baterías, las tarjetas y el monopié colgado del bolsillo del pantalón
Imprescindible sólo la cámara, el angular y las 2 tarjetas de 1Gb, que me dan para 214 fotos en Raw (hice unas 170 de las que igual se salva alguna, todas en las horas centrales del día)
Aconsejable: el monopié más que el 70-300. El 70-300 lo utilicé, no para sacar personas, sino para obtener detalles en la Plaza de San Pedro, y en otras muchas. Y también para comprimir algunos planos. Pero claro, si quieres ISO 100, necesitas el monopié por lo menos. Y en algunos interiores, en los que apenas hay luz, el monopié es absolutamente necesario, aunque utilices el gran angular. Pienso que es de las mejores compras que he realizado, barato, cerrado mide unos 60cm y pesa medio kilo, pero abieto mide casi 180cm, como yo. Por tanto, casi mejor Monopié que tele, o antes que tele
En cuanto al disco duro, es interesante, pero dejarlo en el Hotel. Al precio de las tarjetas, puedes llevar 2 o 3, y no cargas con el muerto. A no ser que creas que en 1 día puedes hacer más de 200-300 fotos. Cada uno es cada uno
Y el flash en Roma no lo usé. Pero hay lugares en los que no me dejaron utilizar el Monopié y entonces tiré de flash, entre otras cosas, porque este sí que ilumina un rato. Ejemplos de lugares en los que no me dejaron utilizar el monopié pero sí el flash: las Cuevas de Artá en Mallorca, un Castillo en Rodas, un museo en Alejandría, ... Trípode o Monopié no, pero Flash sí
No lo entiendo
Eso sí, calor un rato, y andar otro rato, y la peña partida el culo por el pedazo mochila que cargaba también. Eso sí cuando de la misma sacaba la botella litro y medio de agua, alguno ya no se reía tanto. Y es que en Italia, el agua es cara