India – 2005/11/1 Diwali.

Ya hemos llegado a la última etapa de nuestro viaje, Amritsar, en el estado de Punjab.
Nuestra llegada ha coincidido con la celebración de una importante fiesta hindú, el Diwali
ruidosa celebración, rememora la llegada de Rama (la séptima reencarnación de Vishnú) a la tierra.

Para facilitarle su llegada, los hindús encienden velas que le guían en la oscuridad y a su vez, hacen estallar  petardos, cohetes y todo tipo de artefactos pirotécnicos.


Hemos subido al tejado del hotel a sacar fotos del evento cuando hemos visto que una calle de al lado estaba muy animada. Nos hemos dirigido con celeridad hasta ese punto donde hemos sido recibidos con una hospitalidad fuera de lo común. En esta región no están muy acostumbrados a ver extranjeros y todo el mundo se nos ha acercado a hablar y a invitarnos a participar en la fiesta. Nos han animado a encender cohetes y tracas, no con cierto temor por nuestra parte, a lo que hemos accedido y nos hemos divertido mucho. Cuando ya nos íbamos, se nos ha acercado un hombre (un doctor especializado en medicina infantil) que nos ha invitado a su casa y nos ha enseñado algunas de las costumbres de esta fiesta. Al cabo de unos minutos, nos hemos despedido pero no sin antes haberle prometido que al día siguiente volveríamos a su casa para enseñarle las fotos y darle un cd con las mismas. Así es la India, siempre te depara alguna sorpresa.